La raíz de la vid (Vitis vinifera) cumple funciones esenciales para el crecimiento, desarrollo y producción de la planta:
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Absorción de agua y nutrientes
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Capta del suelo el agua y los minerales necesarios para la fotosíntesis, el crecimiento y la formación de racimos.
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Fijación y sostén
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Ancla la vid al suelo, dándole estabilidad frente al viento y permitiendo su desarrollo como planta trepadora.
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Almacenamiento de reservas
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Acumula carbohidratos y otras sustancias de reserva que la planta utiliza durante el reposo invernal y en la brotación de primavera.
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Interacción con el suelo y microorganismos
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Se asocia con hongos micorrícicos que favorecen la absorción de fósforo y otros nutrientes.
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Regulación del vigor y la calidad de la uva
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Según el tipo de portainjerto y profundidad de las raíces, puede influir en el vigor vegetativo de la vid y en la concentración de compuestos en las uvas.
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👉 En resumen: la raíz de la vid nutre, sostiene, almacena y regula la vida de la planta.
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